La primera vez que leí a Elizabeth Gilbert, me enamoré de su narrativa, de su forma tan auténtica y natural de resaltar lo extraordinario de momentos tan cotidianos.

La primera vez que la escuché hablar en una charla, me dejó en un estado de inspiración y admiración muy profundo. Su forma de hilar ideas con palabras, fusionándolas logrando una creación nueva, cautivadora y sensible me sigue impactando.

Y la primera vez que escuché el podcast nuevo de @ted, con Elizabeth Gilbert como primera invitada, me cayeron lágrimas de la emoción, (se llama «The Ted interview»y está en Soundcloud, Itunes, Spotify, etc.). Realmente es un ser humano muy especial. Se las recomiendo escuchar en un momento tranquilo, donde le puedan dar el máximo de atención y entrega a sus palabras.

Big magic ilustración

Desde su concepción de la creatividad, (sobre la cual profundiza mucho en su libro Big Magic), hasta la de pasión, inspiración, trabajo y duelo, contando su experiencia tras la pérdida de su esposa, emana luz en cada palabra. Sus palabras son reconfortantes, suaves y firmes al mismo tiempo. Transmite una sensación de calma y una motivación fortalecedora en una misma oración. Creo que esa es una de sus mayores fortalezas como oradora y escritora. 

Como siempre que la leo o escucho, me dejó pensando mucho. Y sobre todo: me dejó preguntándome mucho.

¿Por qué creamos?

No tenemos ninguna garantía de que lo que crearemos funcionará, ni que será único, increíble, ni que revolucionará el mercado o que ganará premios; ni siquiera de si será bueno. De hecho, las probabilidades tampoco están a nuestro favor.

Sin embargo, sí contamos con una certeza aun más poderosa que las anteriores: crear nos cambia. 

Después de haber creado algo, ya no somos los mismos. El cambio puede ser leve, profundo, gradual, intenso, drástico, inesperado, enriquecedor.

No podemos predecir cómo nos afectará, pero hacer algo donde antes no había nada, nos altera en nuestro núcleo más esencial. Nos conecta con algo más allá de nosotros, con una capacidad de reinvención creativa profundamente conectada con lo que somos: seres evolutivos en constante cambio, a pesar de que no sea siempre accesible.

IMG-3301

Por eso creamos. Porque haciéndolo nos descubrimos, vamos pelando capas hasta llegar a la más esencial. Nos creamos a medida que hacemos, y evolucionamos en ese proceso.

En palabras de Elizabeth: «Lo que creás no es tan importante como lo que creás de vos en ese proceso». Tu propia vida se convierte en tu mayor obra de arte.

«Tus razones para crear son razón suficiente. Dedicándote a lo que amas es posible que, sin darte cuenta, termines ayudándonos mucho a nosotros. («No existe un amor que no termine ayudando», enseñaba el teólogo Paul Tillich). Así pues, dedícate a lo que te haga sentir vivo. Déjate llevar por lo que te fascina, por tus obsesiones y compulsiones. Fíate de ellas. Crea algo que siembre la revolución en tu corazón.»

– Elizabeth Gilbert